El gato balines, es una raza de tipo oriental derivada del gato siamés, teniendo origen en
la década de los cincuenta, en Nueva York Estados Unidos, cuando nacieron varias camadas de gatitos
de pelo largo, cuyos padres eran siameses, de ahí los criadores se dieron a la tarea de pulir la
nueva raza por medio de ser muy selectivos y cuidadosos al cruzar solo gatos con estas
características.
Sus movimientos son con gracia y estilizados, y es probable que de ahí se derive
su nombre, ya que se le relaciona con los movimientos que se realizan en las danzas balinesas,
aunque esto no tiene fundamentos muy claros.
Los gatos balineses se diferencian de los siameses debido a que son más
delgados, de pelo largo, de cuello más largo, orejas más puntiagudas, patas delanteras largas y
suelen ser menos robustos, aunque comparten las tonalidades del color de ojos, que casi siempre son
azules.
Rasgos fisicos del gato balines
La complexión del gato balines es delgada y estilizada, su cuerpo es largo al
igual que su cuello y muy fino. Su cara es proporcional con su cuerpo, tiene orejas grandes,
puntiagudas y un poco separadas. Su cabello es corto en el cuerpo, pero largo en la cola, donde
regularmente hay un cambio de color significativo en cuestión de tonalidades. Sus ojos se sesgan
hacia su nariz y regularmente sus bigotes apuntan hacia abajo.
Su pelo es denso, por eso la importancia de cepillarlo de manera continua para
evitar nudos y ayudar a mudarlo de manera natural, esto evitara que el gato deje mucho pelo en
muebles y espacios del hogar. Los colores comunes son de muy amplia variedad, aunque algunos
conservan el tono y el estilo de los gatos siameses, así como las tonalidades proporcionadas en su
cuerpo.
Cuando nacen suelen ser de color blanco, pero esto cambia con el paso del
tiempo, ya que en unas semanas adquieren el color que portaran durante el resto de sus vidas. Los
gatos balineses
de pequeños suelen ser muy juguetones y extrovertidos, buscan cosas que llamen su atención para
interactuar.
Debido a sus rasgos físicos, nos puede fácilmente impresionar la capacidad que
tiene para trepar a lugares inimaginables, así como saltar para alcanzar sus objetivos o
simplemente jugar al interactuar con algo que llama su atención, esto también es importante para la
convivencia del hogar, pues si se quiere que el gato no alcance cierta comida u objetos, será
necesario guardarlos dentro de estantes difíciles de abrir.
Lo que puede llegar a descartar su raza, es que presenten manchas en el vientre,
que sean de aspecto moteado en su pelo o que el color de sus ojos no sea azul.
Suelen acicalarse con frecuencia, por lo que es común verlos pasando repetidas
veces la lengua por todo el cuerpo, esto les ayuda a controlar la muda de cabello y a mantenerse
limpios. Aunque no están peleados con el agua, en general no es de su gusto que alguien los bañe, y
si se requiere hacerlo es preferible que lo haga el dueño o la persona más cercana a él, ya que
suelen desconfiar de los extraños.
La personalidad del gato balines
Ideal como mascota, el
gato balines
se adapta a la vida familiar sin problemas, sobre todo si se le deja un espacio para descansar,
alimentarse y hacer sus necesidades. Al igual que todos los gatos, solo necesita una pequeña caja
que contenga arena especial, para acostumbrarse a depositar ahí sus excrementos y orines. Dicha
caja debe de limpiarse con frecuencia, esto evitara que el mismo gato ensucie su pelaje.
Tener jardín amplio es otra opción, ya que el gato saldrá a los lugares donde
haya tierra y escarbara un poco para después enterrar sus desechos.
Es un gato que disfruta de estar en brazos, a diferencia de muchos otros que se
molestan si los quieren abrazar, puede llegar a maullar de manera repetitiva para tener la atención
de la persona y que lo alcen en brazos. De igual manera suelen ser muy cariñosos y expresivos con
sus camadas de gatitos, lo que es singular en comparación con el resto de los gatos, llegando a
expresar cariño y mucha afectividad con sus hijos.
Es complicado que esta raza conviva con otros gatos o con otras mascotas, debido
a su característica egocéntrica, y se podrán tener problemas como el que el gato marque por medio
de sus orines su territorio o agreda a otro animal por defender su espacio. Lo ideal es tenerlo
solo, la compañía no es algo que esta raza requiera.
Tampoco se les puede tener encerrados por mucho tiempo, tienden a tomar pequeños
paseos a la intemperie, aunque siempre regresan a su hogar. Si no se le permite salir, busca la
manera de brincar obstáculos o abrir ventanas o puertas que le impidan el paso; respirar aire
fresco les hace bien, inclusive les ayuda a mejorar su humor cuando están impacientes.
Problemas oculares
Uno de los principales problemas de salud que puede presentar el gato balines es
el estrabismo, es hereditario, por lo que si alguno de los padres tiene esta característica,
es muy común que alguno de sus gatos nazca con este padecimiento. El estrabismo es un problema
ocular cuya característica principal es la mala posición de los ojos (bizcos), y aunque puede ir
unido a problemas en su visión, regularmente los gatos pueden hacer una vida normal, con los
cuidados regulares de un gato sin estrabismo.
Otro padecimiento que pueden presentar los gatos balines tiene que ver también
con problemas oculares y se denomina nistagmus, que es el movimiento frecuente e
involuntario de uno o ambos ojos de manera significativa. El movimiento puede ser de manera
circular o hacia los lados, con diferencia en su ritmo y se puede presentar mas cuando recién
acaban de despertar de su sueño. Lo anterior puede reducir también su visión.
No es un gato que se considere entre las razas longevas, sin embargo, puede
llegar a vivir de 10 a 15 años sin problemas de salud, sobre todo si se tiene especial cuidado
tanto en su alimentación, que sea variada, como en sus chequeos periódicos y esquemas de
vacunación. |